sábado, 2 de febrero de 2008

¿A lo hecho pecho o al pecho hecho?

Nuestro país, siempre se ha caracterizado en el mundo entero por la belleza, ojo, no sólo femenina sino también masculina pero a pesar de eso sigue dejándose influenciar por el avance científico y tecnológico en lo que a la cirugía estética respecta.
Es bastante sabido que los senos en una mujer muestran su feminidad, algunos hombres piensan que "mientras más tetas mejor" pero otros prefieren lo contrario. Son también en ocasiones de gran importancia para la parte erótica y descendiente ¿Por qué intentar variarlos? Buena pregunta…
Hoy en día es muy común ir a cualquier sitio y conseguir a una mujer con implantes de senos, no por alguna enfermedad o algo parecido sino por gusto propio y satisfacción.
Con comentarle qué; En una pequeña encuesta realizada en la Universidad Santa María, núcleo Oriente, específicamente en un salón de clases donde por cada 14 mujeres, se pudo notar que tres están operadas de los senos y sus operaciones fueron entre el año 2006 y 2007. Las otras 11 son naturales pero… nueve de esas restantes afirman claramente que estarían dispuestas a someterse a una operación para aumento de volumen en lo que a senos respecta y que incluso está en sus planes futuros. Saque usted mismo la cuenta.

Y... aunque no hay nada como la naturaleza, los implantes mamarios llegaron para quedarse, cada día las técnicas de colocación y cuidado se van e irán mejorando...
¿Y usted de cuantos cc las quiere?
La pura realidad
Gracias al film venezolano, Puras Joyitas, pude comenzar a ver a los implantes de senos como una especie de derecho universal sin barreras de ningún tipo “y ojo, sin referirme a barreras históricas como el nivel socio-económico o estatus social sino a otro tipo de barreras que ya son cosas del pasado, antes a los hombres sólo se les estaba permitido soñar con ellas y hoy pueden soñar hasta con tenerlas. ¡Sí! Con tenerlas…"

“No es fácil escapar de su terreno”. Las bolsas prostéticas de cualquier tamaño son vendidas en ocasiones hasta en supermercados y los doctores las colocan en serie a actrices, modelos y hasta a locutoras de radio, jóvenes, viejas, madres o abuelas. “Hasta adolescentes que no saben que les van a salir naturales, las tienen en la cabeza incluso más que los propios hombres”.



“Antes era prohibido, hoy es aceptado y mañana puede ser obligatorio”



Gabriel Mazzanti














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